Después de que la actividad deportiva en casi todo el mundo quedara prácticamente paralizada a mediados de marzo, el martes 24 de marzo el Comité Olímpico Internacional y el primer ministro japonés Shinzo Abe comunicaron que los Juegos Olímpicos 2020, que debían inaugurarse el 24 de julio en Tokio para extenderse hasta el 9 de agosto, fueron aplazados para el 2021, en una fecha aún a designar.
El aplazamiento es una situación sin precedentes en la historia de uno de los máximos acontecimientos deportivos del mundo, aunque los Juegos habían sufrido la cancelación –por las guerras mundiales- en 1916, 1940 (cuando debían disputarse en Tokio) y 1944.
La World Athletics había comunicado, respondiendo al sentimiento de toda la comunidad atlética, comenzando por los deportistas, entrenadores y oficiales, la necesidad de esa postergación, que también obligará a reorganizar su propio calendario, que contemplaba para 2021 la disputa del Campeonato Mundial de Atletismo en Eugene, Oregon.
La pandemia por coronavirus, en grave extensión en todos los continentes en estas semanas, ya había obligado a suspender los grandes eventos atléticos de la temporada. World Athletics pasó para 2021 el Campeonato Mundial Indoor en Nanjing, para el 17 de octubre el Campeonato Mundial de Medio Maratón en Gdynia (Polonia) y, aún sin fecha, aplazó el Campeonato Mundial u20 en Nairobi, además de suspender las cinco primeras etapas de la Diamond League. Los grandes maratones de abril –como Boston, Londres, Rotterdam y París entre ellos- también fueron pasados para el otoño boreal.
En la Argentina, la Confederación Atlética también suspendió todas sus actividades de estos meses, incluyendo los tres torneos del Grand Prix Sudamericano y el Campeonato Nacional en Concepción del Uruguay.
Casi todas las competiciones de fútbol a nivel mundial están postergadas y los campeonatos continentales (Copa América y Eurocopa) pasaron al 2021.
«Aunque todos sabemos que diferentes partes del mundo están en diferentes etapas del virus, la opinión unánime en todas nuestras áreas es que celebrar unos Juegos Olímpicos en julio de este año no es factible ni deseable», había escrito el presidente de World Athletics, Sebastian Coe, en una carta dirigida al COI, poco antes de la reunión celebrada por el organismo olímpico en Lausana. Apenas anunciada la suspensión, World Athletics declaró: «Le damos la bienvenida a la decisión del COI y del Gobierno de Japón de posponer los Juegos Olímpicos hasta 2021. Es lo que los atletas querían y creemos que esta decisión le dará a los deportistas, oficiales y voluntarios respeto y seguridad para los próximos tiempos». El mismo comunicado indica que «World Athletics está listo para trabajar con el COI y todos los deportes en una fecha alternativa para el 2021» y abre la posibilidad de mover la fecha prevista para el Campeonato Mundial de Atletismo en Eugene, Oregon. La idea de celebrar los Juegos en las fechas previstas había generado una enorme resistencia en el ambiente deportivo.